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Guía ecográfica
en la anestesia regional
Andrew T. Gray
Puntos clave
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1.
La imagen ecográfica aclara la estructura de los nervios
periféricos y la anatomía adyacente para un bloqueo
regional.
2.
La ecografía proporciona también imágenes en tiempo
real para la colocación de la punta de la aguja e inyección
de medicamentos.
3.
Los nervios periféricos tienen una ecotextura en «panal
de miel» característica formada por su tejido conjuntivo y
fibras nerviosas. Al desplazar el transductor ecográfico a
lo largo de un curso conocido de un nervio visto éste en
el eje corto es con frecuencia el mejor modo para
visualizar los fascículos y confirmar la identidad del nervio.
Con una buena preparación, los especialistas aprenden a
posicionar de modo natural el transductor para aumentar
los ecos recibidos a partir de un nervio.
4.
Las inyecciones correctas de un anestésico local aclaran
el borde del nervio y siguen el rastro a lo largo del nervio
y sus ramas. La variación anatómica en la localización del
nervio, que es una fuente potencial de error, puede
visualizarse directamente.
5.
Las imágenes ecográficas pueden prevenir y detectar
fenómenos críticos tales como una inyección intravascular
o intraneural, lo que puede mejorar la seguridad durante
los procedimientos de anestesia regionales.
6.
El empleo de las imágenes ecográficas se ha convertido
en una herramienta común en las técnicas anestésicas de
bloqueo regional.
©
2010. Elsevier España, S.L. Reservados todos los derechos
La ecografía permite la visualización directa de los nervios perifé-
ricos, la aguja para el bloqueo, y la distribución del anestésico loca
l 1.
Esta modalidad de imagen se ha demostrado muy útil para guiar
las inyecciones de medicamentos dirigidas y la colocación de caté-
teres. Los últimos años han sido testigos de un impresionante
aumento en el empleo de guía ecográfica para la anestesia regional.
Se presentan en este capítulo los principios generales de las imáge-
nes ecográficas para un bloqueo regional con ejemplos específicos
de los procedimientos de bloqueo.
Principios de la imagen ecográfica
El ultrasonido es un sonido con una frecuencia por encima de la
gama audible (
>
20.000 ciclos/s). Las frecuencias utilizadas en la
obtención de imágenes en la clínica se hallan en la gama de 1 a
20MHz. Las ondas ultrasónicas tienen una velocidad de 1.540m/s
en el tejido blando (13
m
s/cm tejido adelante y atrás en relación
con el tiempo total de retorno de los ecos recibidos).
La velocidad del sonido está determinada por el módulo volu-
métrico y la densidad del medio
( tabla 43-1 ). Por consiguiente, la
velocidad del sonido en un medio dado es esencialmente indepen-
diente de la frecuencia. El producto de la frecuencia y longitud de
onda de las ondas sónicas es la velocidad de las ondas (veloci-
dad=frecuencia× longitud de onda). Por ejemplo, la longitud de
onda de una onda sónica de 10MHz en el tejido blando es de
0,154mm. La atenuación del ultrasonido en el tejido blando es
aproximadamente 0,75dB/(cm-MHz). Esta atenuación se debe prin-
cipalmente a la absorción. Otros tejidos absorben menos las ondas
sónicas (p. ej., líquidos) o más (p. ej., hueso) que el tejido blando. Se
genera una onda de reflexión en la interfase de dos medios con
diferentes impedancias acústicas. La impedancia acústica es el pro-
ducto de la densidad y la velocidad. El coeficiente de reflexión
R=(Z1 – Z2)/(Z1+Z2), donde Z1 y Z2 son las impedancias acústi-
cas de los dos medios. Si Z1=Z2 no hay onda reflejada.
La primera modalidad de imagen utilizada con el ultraso-
nido fue el eco en modo A (amplitud, mostrada con un oscilosco-
pio). En la actualidad, la mayoría de las imágenes se obtienen con
eco en modo B (brillo). Esta modalidad utiliza mapas de pospro-
cesamiento para asignar valores en la escala de gris a píxeles a
partir de las amplitudes de eco recibidas. Las velocidades de repro-
ducción de las imágenes 2D son de aproximadamente 30/s. La luz
ambiental tiene un gran efecto sobre la discriminación visual, de
modo que una iluminación mortecina sin resplandor es especial-
mente útil para obtener imágenes de objetivos de bajo contraste
como los nervios. Otra modalidad útil de obtención de imágenes
es el eco en modo M (movimiento). Las velocidades de muestreo
con el modo M son muy altas (aproximadamente 1.800/s, con una
gran resolución en tiempo pero sólo una dimensión espacial).
No hay efectos biológicos adversos confirmados del diagnóstico
ecográfico. Aunque la absorción de ondas sónicas puede contribuir a