Table of Contents Table of Contents
Previous Page  1585 / 2894 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 1585 / 2894 Next Page
Page Background

49

Anestesia para la cirugía torácica

Peter D. Slinger y Javier H. Campos

Puntos clave

1585

1.

Los pacientes en quienes se va a realizar una resección

pulmonar deben someterse a una evaluación triple de su

función respiratoria: función mecánica pulmonar, función

parenquimatosa pulmonar y reserva cardiopulmonar,

lo que constituye el «trípode» en el que se apoya la

evaluación respiratoria.

2.

Después de la cirugía de resección pulmonar, suele

poderse destetar y extubar a los pacientes que tienen

una función respiratoria postoperatoria predicha

adecuada en el quirófano, siempre que estén alerta, con

una temperatura adecuada y sin grandes molestias.

3.

Las medidas que han demostrado disminuir la incidencia

de complicaciones respiratorias en pacientes de alto

riesgo que se someten a cirugía torácica son dejar de

fumar, la fisioterapia y la analgesia epidural torácica.

4.

Los pacientes geriátricos tienen un alto riesgo de

complicaciones cardíacas, sobre todo arritmias, después de

someterse a resecciones pulmonares extensas. La capacidad

de esfuerzo preoperatoria es el mejor factor predictivo de

los resultados postoracotomía en los ancianos.

5.

Es necesario que los anestesiólogos sean capaces de

realizar una fibrobroncoscopia y que cuenten con unos

conocimientos detallados de la anatomía bronquial para

lograr un aislamiento pulmonar fiable.

6.

El uso de tubos endobronquiales de doble luz (TDL) es el

método estándar para lograr el aislamiento pulmonar en

adultos. Los sistemas de bloqueo bronquial son una

alternativa razonable para lograr el aislamiento pulmonar

en pacientes con anomalías de las vías respiratorias

altas o bajas.

7.

La hipoxemia durante la ventilación monopulmonar

(VMP) es infrecuente cuando se usan técnicas

anestésicas intravenosas o anestésicos volátiles a una

dosis menor o igual a 1 CAM. El uso de presión positiva

continua en la vía respiratoria (CPAP) o de presión

teleespiratoria positiva (PEEP) en el tratamiento de la

hipoxemia durante la VMP debería guiarse por la

mecánica pulmonar de cada paciente.

8.

El uso de volúmenes corrientes elevados durante la VMP

(p. ej., 10ml/kg) puede contribuir a la lesión pulmonar

aguda, sobre todo en pacientes con un mayor riesgo

respiratorio, como después de las neumonectomías.

9.

El control anestésico de los pacientes con masas del

mediastino anterior o superior debería guiarse por los

síntomas del paciente, la TC preoperatoria y la

ecocardiografía. El principio fundamental del control

anestésico en estos pacientes sigue la máxima de

noli

ponti ignii consumere

(«no quemar los puentes»).

10.

El bloqueo paravertebral continuo con anestésicos

locales combinado con una analgesia multimodal es una

alternativa razonable a la analgesia epidural para la

cirugía torácica y presenta menos efectos secundarios.

©

2010. Elsevier España, S.L. Reservados todos los derechos

La anestesia en cirugía torácica engloba una amplia variedad de

procedimientos diagnósticos y terapéuticos que afectan a los pul-

mones, las vías respiratorias y las estructuras intratorácicas. Las

técnicas anestésicas empleadas en los pacientes sometidos a

intervenciones quirúrgicas no cardíacas han evolucionado a la

par que dichas operaciones. La cirugía torácica a principios del

siglo pasado se realizaba sobre todo por indicaciones infecciosas

(p. ej., absceso pulmonar, bronquiectasias, empiema). Aunque

estas afecciones aún se tratan con cirugía en la era postantibió-

tica, en la actualidad las indicaciones más frecuentes se relacio-

nan con las neoplasias malignas (pulmonares, esofágicas y

mediastínicas). Además, en las últimas 2 décadas se ha vislum-

brado el inicio del tratamiento quirúrgico para las enfermedades

pulmonares terminales con procedimientos como el trasplante pulmonar y la reducción del volumen pulmonar. Existen dos

técnicas que son fundamentales para el control anestésico en la

mayoría de los procedimientos torácicos: el aislamiento pulmo-

nar para facilitar el acceso quirúrgico intratorácico y el control

de la anestesia monopulmonar. En este capítulo se describe en

primer lugar la evaluación preanestésica para la cirugía torácica,

tras lo que se esbozan los principios terapéuticos comunes a la

mayoría de los procedimientos quirúrgicos torácicos. Después, se

describen los aspectos anestésicos específicos en las intervencio-

nes quirúrgicas frecuentes y menos habituales, para finalizar con

la exposición de los aspectos del tratamiento postoperatorio en

los pacientes de cirugía torácica.