deformidades espinales. Pueden ser procedimientos simples o
implicar fusiones vertebrales en múltiples niveles, abordajes por vía
anterior y/o posterior, y pérdidas considerables de sangre. Algunas
de estas intervenciones, por ejemplo las discectomías, pueden rea-
lizarse bajo anestesia regiona
l 108 .En la mayoría de las intervenciones de columna se requiere
anestesia general. En estos pacientes con artrosis previa generali-
zada, la intubación traqueal puede ser un problema (
tabla 60-8 ). La
intubación con el paciente despierto y sedado utilizando el fibros-
copio suele ser la técnica más segura. Esta técnica es obligatoria en
un paciente con inestabilidad cervical que requiere una estabiliza-
ción por vía posterior. Primero hay que intubar a estos pacientes
con un fibroscopio, después colocarlos en posición de decúbito
prono, sedados pero despiertos (si es posible) y luego evaluar el
movimiento correcto de las cuatro extremidades antes de inducir
la anestesia general.
La colocación cuidadosa de los pacientes en estas interven-
ciones quirúrgicas es una responsabilidad compartida entre el ciru-
jano y el anestesiólogo (v. cap. 26). Como ya se ha comentado, los
pacientes que tienen riesgo de sufrir compresión medular deben
ser colocados bajo una ligera sedación, para poder observar que el
movimiento de las extremidades está conservado antes de inducir
la anestesia general. Algunas descompresiones cervicales por vía
posterior se realizan en posición de sedestación, lo que obliga a
tener presente la posibilidad de que se produzca un embolismo
aéreo venoso. En algunas ocasiones, las intervenciones por defor-
midades complejas de la columna necesitan un abordaje por vía
anterior y posterior. En los abordajes lumbosacros, el paciente está
en supino con las piernas extendidas. En estas situaciones, la retrac-
ción pélvica puede comprometer el flujo de sangre a las piernas
siendo conveniente colocar un pulsioxímetro en un dedo del pie.
Para un abordaje anterior toracolumbar, los pacientes se colocan
en decúbito lateral y es importante controlar la posición del cuello
y de las extremidades dependientes. La
tabla 60-9enumera las
posibles complicaciones que pueden surgir de la posición en decú-
bito prono en estas intervenciones.
Las intervenciones correctoras más complejas incluyen
pacientes con escoliosis, cifosis, cifoescoliosis y cirugía de revisión
de pacientes con artrodesis toracolumbares previas. La cifosis es
una exagerada flexión anterior de la columna. La escoliosis se
define por una rotación lateral de la columna mayor de 10 grados,
que se acompaña de rotación de las vértebras. Se puede clasificar
como idiopática, congénita o neuromuscular. La escoliosis congé-
nita es el resultado de alteraciones embrionarias que ocurren pre-
cozmente en el desarrollo de la columna vertebral y en la mitad de
los casos se asocian a otras malformaciones orgánicas. La escoliosis
idiopática del adolescente es bastante frecuente y está presente en
un 2-4% de los niños entre 10 y 16 años. Sólo el 10% de estos
adolescentes necesitan algún tipo de intervención médica. La inter-
vención quirúrgica se lleva a cabo cuando la magnitud de la cur-
vatura es mayor de 40 grados según el método de Cobb
( fig. 60-9 )y existe la posibilidad de que progrese. En general, en las escoliosis
idiopáticas las curvas son hacia la derecha; las curvas hacia el lado
izquierdo suelen asociarse a otras anomalías torácicas.
Las escoliosis a nivel torácico dan lugar a una caja torácica
estrecha que produce un descenso en la distensibilidad de la pared
y a una patología pulmonar restrictiva. Con ángulos de Cobb supe-
riores a 65 grados los volúmenes pulmonares están significativa-
mente disminuidos. Antes de la cirugía es necesario estudiar las
pruebas de función respiratoria, aunque la tolerancia al ejercicio es
determinante del efecto que la severidad de la curva ejerce sobre
la función respiratoria. Esta información es decisiva en el plantea-
Anestesia para la cirugía ortopédica
2021
60
Sección IV
Anestesia por subespecialidades en el adulto
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Tabla 60-8
Predictores de una intubación endotraqueal difícil
Dismetría facial (traumatismo)
Desviación traqueal
Fracturas cervicales
Apertura pequeña de la boca (espacio entre arcadas dentarias)
Falta de visualización de los pilares palatinos y úvula (Mallampati)
Limitación para la movilidad del cuello
Incisivos prominentes
Distancia entre cartílago tiroides y mandíbula (
<
6 cm)
Arco maxilar estrecho
Tabla 60-9
Complicaciones de la posición en decúbito pron
o *Vía aérea
Acodamiento del TET, salida del mismo
Edema vía aérea superior
Cuello
Hiperextensión o hiperflexión
Rotación cervical: compromiso del flujo cerebral
Ojos
Compresión orbital: oclusión de la arteria central
de la retina, y del nervio supraorbitario
Úlcera corneal
Abdomen
Compresión que se transmite a las venas
epidurales: aumento del sangrado
Extremidad superior Estiramiento del plexo braquial: con los brazos
hacia fuera
Compresión nervio cubital: con los brazos a los
lados
Extremidad inferior
Flexión de las caderas: oclusión de la vena femoral,
TVP, acodamiento de injertos vasculares
Compresión lateral del peroné: parálisis del nervio
peroneo
Compresión sobre la cresta ilíaca: nervio
femorocutáneo lateral
*Véase el capítulo 26.
TET, tubo endotraqueal; TVP, trombosis venosa profunda.
Figura 60-9
Radiografía de un paciente con escoliosis. El ángulo de Coob es
un ángulo formado por una línea que se dibuja perpendicular al techo de la
vértebra superior de la curva de escoliosis y una línea similar dibujada a lo
largo de la base de la vértebra inferior. En este paciente el ángulo de Coob
es de 62 grados.
(De Reamy BV, Slakey JB: Adolescent idiopathic scoliosis:
Review and current concepts.
Am Fam Med
64: 1-10,2001.)