REUNIÓN 3
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Insuficiencia hepática
Hay poca bibliografía publicada acerca del uso de NACOD en pacientes
con insuficiencia hepática. La disfunción hepática potencia el efecto de los
anticoagulantes orales, por lo que las guías recomiendan empezar con una
dosis baja de warfarina diaria (≤ 5 mg) y aumentar el número de controles
por semana (≤ 4)
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Nuevos anticoagulantes orales en poblaciones especiales
Los antagonistas de la vitamina K (AVK) han sido siempre el primer tratamiento
para la prevención de los eventos tromboembólicos en pacientes con FA,
como el ictus. Estos fármacos son difíciles de usar por su lento inicio y cese
de acción, por su gran variabilidad inter e intraindividual en las concentracio-
nes plasmáticas, y por su alto potencial de interacción con otros fármacos
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.
Recientemente, en el tratamiento antitrombótico se han incorporado NACOD,
según su mecanismo de acción: vía antitrombina (dabigatrán) y 2 anti-FXa
(rivaroxabán y apixabán). Estos fármacos presentan distintas características
farmacocinéticas, farmacodinámicas y aclaramientos.
Con tantas opciones terapéuticas disponibles, hay que encontrar el fármaco
que mejor se ajuste a las necesidades del paciente; lo que conlleva un mejor
conocimiento de los fármacos, de los pacientes y de sus comorbilidades.
Hay situaciones especiales en las que los pacientes van a necesitar un
fármaco muy concreto (p. ej., en contraindicaciones como la insuficiencia
renal grave o la insuficiencia hepática). Además, existen efectos adversos
que hay que tener en cuenta (p. ej., en el caso de dabigatrán el problema
de dispepsia o riesgo de sangrado gastrointestinal).
También se observó con dabigatrán un aumento de isquemias en el estudio
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Tanto la Guía de las Sociedades Españolas de Hematología y Hemoterapia
(SEHH) y la de Trombosis y Hemostasia (SETH), como la Agencia Española
de Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) afirman que los pacientes