1872
Anestesia por subespecialidades en el adulto
IV
Los pacientes que precisan anestesia para la cirugía renal y genitouri-
naria con frecuencia se encuentran en las edades extremas de la vida.
Además de los cambios fisiológicos del envejecimiento en pacientes
ancianos, es frecuente la comorbilidad cardiovascular y respiratoria
simultánea. La historia clínica, la exploración física y pruebas de
laboratorio adecuadas son necesarias para evaluar las enfermedades
asociadas. En pacientes urológicos pediátricos una historia cuida-
dosa debe excluir otras lesiones congénitas no urológicas.
Las intervenciones urológicas se realizan principalmente
en riñones, suprarrenales, uréteres, vejiga urinaria, próstata, ure
tra, pene, escroto, testículo y cordón espermático. Como su iner
vación sensitiva es principalmente toracolumbar y sacra (
tabla 55-1 ),
estas estructuras se adaptan bien a la anestesia regional.
Inervación del sistema
genitourinario
Las partes del sistema genitourinario que están en el abdomen
reciben su inervación del sistema nervioso autónomo a través de
vías simpáticas y parasimpáticas. Los órganos urinarios pélvicos y
los genitales están inervados por nervios somáticos y autónomos.
La
tabla 55-1resume las vías de conducción del dolor y los niveles
medulares del sistema genitourinario.
Riñón y uréter abdominal
Los nervios simpáticos que van hacia el riñón se originan como
fibras preganglionares en los segmentos que van desde el octavo
segmento torácico al primero lumbar y convergen en el plexo
celíaco y los ganglios aorticorrenales
( fig. 55-1). Las fibras posgan-
glionares que van hacia el riñón se originan principalmente en los
ganglios celíacos y aórtico renales. Algunas fibras simpáticas pueden
llegar al riñón a través de los nervios esplácnicos. Las aferencias
parasimpáticas proceden del nervio vag
o 1 .Las fibras nerviosas
hacia el uréter se originan desde el 10.° segmento torácico hasta el
2.° lumbar y establecen sinapsis con fibras posganglionares en los
plexos aorticorrenal e hipogástricos superior e inferior. Las aferen-
cias parasimpáticas proceden de los segmentos medulares sacros
segundo a cuart
o 1. Las fibras nociceptivas viajan junto a los simpá-
ticos hasta los mismos segmentos medulares. El dolor procedente
del riñón y del uréter es un dolor referido principalmente hacia la
distribución somática de los segmentos 10.° torácico a 2.° lumbar:
Tabla 55-1
Vías de conducción del dolor y segmentos medulares de proyección del dolor del sistema genitourinario
Órgano
Simpáticos, segmentos
medulares
Parasimpáticos
Niveles medulares de conducción
del dolor
Riñón
T8-L1
PC X (vago)
T10-L1
Uréter
T10-L2
S2-S4
T10-L2
Vejiga
T11-L2
S2-S4
T11-L2 (cúpula), S2-S4 (cuello)
Próstata
T11-L2
S2-S4
T11-L2, S2-S4
Pene
L1 y L2
S2-S4
S2-S4
Escroto
NS
NS
S2-S4
Testículos
T10-L2
NS
T10-L1
NS, no significativo para la función nociceptiva.
Figura 55-1
Inervación autónoma y sensitiva del riñón y los uréteres. La
línea continua
indica fibras preganglionares; la
línea discontinua
indica fibras
posganglionares, y la
línea de puntos
indica fibras sensitivas.
(De Gee WF,
Ansell JF: Pelvic and perineal pain of urologic origin.
En
Bonica JJ [ed.]:
The
Management of Pain,
2.
a
ed. Filadelfia, Lea & Febiger, 1990, págs. 1368-1378.)