Table of Contents Table of Contents
Previous Page  2030 / 2894 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 2030 / 2894 Next Page
Page Background

2030

Anestesia por subespecialidades en el adulto

IV

demostraron que la esclerosis de la válvula aórtica es frecuente en

ancianos y se asocia con un aumento del 50% del riesgo de muerte

cardiovascular. Por ello, se ha sugerido que esta esclerosis puede

representar un marcador de arteriopatía coronaria. Se ha propuesto

una asociación similar para la calcificación del anillo mitra

l 23 .

Sistema respiratorio

Las alteraciones del control respiratorio y de la estructura, mecánica y

flujo sanguíneo pulmonares aumentan el riesgo de complicaciones

pulmonares perioperatorias del anciano. Las respuestas ventilatorias a

la hipoxia, a la hipercapnia y al estrés mecánico se alteran de forma

secundaria a la disminución de la actividad del sistema nervioso

centra

l 24 .

Además, los efectos depresores respiratorios de las benzodia-

zepinas, losopioides y los anestésicos volátiles aparecenexacerbado

s 24,25 .

Estos cambios comprometen las respuestas protectoras habituales

frente a la hipoxemia tras la anestesia y la cirugía en los ancianos.

Los cambios estructurales pulmonares por el envejecimiento

consisten en la pérdida de recuperación elástica debido a la reor-

ganización del colágeno y la elastina en el parénquima pulmonar.

Esta disminución, combinada con la alteración de la producción de

surfactante, origina un aumento de la distensibilidad pulmonar. El

aumento de la distensibilidad hace que disminuya el flujo espirato-

rio máximo y la respuesta ventilatoria al ejercici

o 26 .

La pérdida de

elementos elásticos en el pulmón se asocia con un agrandamiento

de los bronquiolos respiratorios y de los conductos alveolares, así

como con una tendencia hacia un colapso precoz de las vías respi-

ratorias de pequeño calibre durante la espiración. Además, se

produce una reducción progresiva de la superficie alveolar, secun-

daria a los incrementos del tamaño de los poros interalveolares de

Kohn. Los resultados funcionales de estas modificaciones pulmo-

nares son el aumento del espacio muerto anatómico, la disminu-

ción de la capacidad de difusión y el aumento de la capacidad de

cierre. Todas estas modificaciones alteran el intercambio gaseoso.

La pérdida de altura y la calcificación de la columna verte-

bral y de la caja torácica provocan el típico aspecto de tórax en

tonel, con aplanamiento diafragmático. Un diafragma plano es

menos eficaz en su mecánica y su función empeora aún más por

la pérdida significativa de masa muscular asociada al envejeci-

miento. Desde el punto de vista funcional, el tórax se vuelve menos

distensible y aumenta el trabajo respiratorio.

Aunque los volúmenes pulmonares se modifican con el

envejecimiento, la capacidad pulmonar total casi no varía. El

volumen residual aumenta un 5-10% por década. Por tanto, la

capacidad vital disminuye. La capacidad de cierre aumenta con

la edad. El cambio de las relaciones entre la capacidad residual

funcional y la capacidad de cierre provoca un aumento del des-

ajuste entre ventilación y perfusión y supone el principal meca-

nismo del aumento del gradiente alveoloarterial de oxígeno que se

observa durante el envejecimiento

( tabla 61-2 ) 27 .

En personas más

jóvenes, la capacidad de cierre es inferior a la capacidad residual

funcional. A los 44 años, la capacidad de cierre se iguala con la

capacidad residual funcional en posición supina y, a los 66 años,

ambos parámetros se igualan en bipedestació

n 27 .

Cuando la capa-

cidad de cierre traspasa los límites del volumen corriente, se

produce un desajuste entre ventilación y perfusión. Cuando la

capacidad residual funcional está por debajo de la capacidad de

cierre, aumentará el cortocircuito y disminuirá la oxigenación arte-

rial. Esto produce una alteración de la preoxigenación. Otra con-

secuencia del aumento de la capacidad de cierre y de la depleción

de la masa muscular es la disminución progresiva del volumen

espiratorio forzado en 1 segundo, que es de un 6-8% cada década.

Con la edad se producen incrementos de la resistencia vas-

cular pulmonar y de la presión arterial pulmonar, que pueden ser

secundarios a las disminuciones de la superficie transversal del

lecho capilar pulmona

r 28 .

La vasoconstricción pulmonar hipóxica

se reduce en los ancianos y puede provocar dificultades en la ven-

tilación monopulmonar.

Regulación renal y del volumen

La masa renal puede disminuir hasta en un 30% hacia los 80 año

s 29 .

Esta pérdida es más destacada en la corteza renal y se correlaciona

con la reducción del número de glomérulos funcionantes. Sin

embargo, existen muchos factores de confusión a la hora de inter-

pretar los datos de los estudios morfológicos más antiguos. El

menor número de glomérulos se ha asociado con un bajo peso al

nacer y las tasas de pérdida glomerular se aceleran con la hiper-

tensió

n 30 .

Además, el flujo sanguíneo renal parece disminuir un

10% cada década. Con la edad se produce una disminución pro-

gresiva del aclaramiento de creatinina, aunque durante el envejeci-

miento normal la creatinina sérica permanece casi sin cambios.

Esto se debe a la reducción de la masa muscular durante esta fase.

Por tanto, la creatinina sérica es un mal factor predictivo de la

función renal en el anciano. Este concepto es relevante para el

correcto ajuste de dosis de los medicamentos que se excretan por

los riñones.

Los cambios funcionales renales durante el envejecimiento

consisten en alteraciones del control electrolítico y de la capacidad

de concentrar y diluir la orina. La capacidad renal para conservar

el sodio disminuye. En términos generales, el anciano tiende a

perder sodio en una situación de ingesta inadecuada de sal. Esta

tendencia, asociada a una disminución de la respuesta de la sed,

puede situar al anciano en situación de riesgo de deshidratación y

depleción de sodio. El anciano también presenta una disminución

de la capacidad de controlar una carga de sal, como lo demuestra

el aumento de la retención de sodio y la expansión del volumen

extracelular durante el período perioperatori

o 31 .

Estos cambios

adquieren una relevancia especial en condiciones de una ingesta

limitada de líquidos.

Cambios hepáticos

El volumen hepático disminuye alrededor de un 20-40% durante

el envejecimiento y el flujo sanguíneo hepático se reduce un 10%

por décad

a 32

. Además, se produce una disminución variable de la

capacidad intrínseca del hígado para metabolizar los fármacos.

Predominan los efectos sobre las reacciones de fase I. Las reduc-

ciones del flujo sanguíneo hepático pueden disminuir las necesi-

dades dedosis demantenimientode los fármacos que semetabolizan

con rapidez. La farmacocinética de los medicamentos de metabo-

lismo lento se afecta más por la capacidad innata del hígado que

por el flujo sanguíne

o 33

.

Tabla 61-2

 Valores normales de P

o

2

arterial

Edad (años)

Media; intervalo (mmHg)

20-29

94; 84-104

30-39

91; 81-101

40-49

88; 78-98

50-59

84; 74-94

60-69

81; 71-91

De Nunn J:

Nunn’s Applied Respiratory Physiology

, 4.ª ed. Oxford, Butterworth-

Heinemann, 1995, pág. 269.