rápida (con frecuencias mayores de 300/min) o si se asocia a
colapso cardiovascular y pérdida de pulsos.
Tratamiento de la parada cardíaca
Una vez que aparece la ausencia de pulso, el tratamiento debe
dirigirse no sólo a corregir el trastorno del ritmo subyacente, sino
también a mantener la viabilidad orgánica durante la parada car-
diorrespiratoria. Se debe prestar una gran atención a la frecuencia
y profundidad correctas de la compresión torácica, evitar la hiper-
ventilación y la interrupción de las compresiones torácicas y admi-
nistrar fármacos que apoyen la perfusión durante los esfuerzos de
reanimación. El algoritmo de tratamiento de la parada sin pulso
mediante soporte vital avanzado en pacientes pediátricos se
muestra en la
figura 87-19 .En la inmensa mayoría de las paradas cardíacas pediátricas,
la bradiasistolia es la actividad eléctrica cardíaca terminal (v.
fig. 87-17 ). El dominio precoz del sistema nervioso parasimpático y
de la actividad
a
-adrenérgica puede explicar parte de los mecanismos dominantes de la bradiasistolia como episodio terminal en los
lactante
s 274 .Además, las taquiarritmias ventriculares (TV/FV) son
2760
Cuidados críticos
VII
Figura 87-19
Algoritmo de la parada sin pulso mediante soporte vital avanzado en pediatría. AESP, actividad eléctrica sin pulso; DEA, desfibrilador externo
automático; FV, fibrilación ventricular; i.o., vía intraósea; i.v., vía intravenosa; RCP, reanimación cardiopulmonar; SVB, soporte vital básico; TV, taquicardia
ventricular.
(De 2005 American Heart Association Guidelines for Cardiopulmonary Resuscitation and Emergency Cardiovascular Care.
Circulation
112:IV-173, 2005.)