Table of Contents Table of Contents
Previous Page  1478 / 2894 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 1478 / 2894 Next Page
Page Background

dente y el túbulo distal aumentando la reabsorción de calcio, y

reduciendo así su eliminación. La extirpación de las glándulas

paratifoideas, que elimina la secreción de su hormona, puede

derivar en importantes alteraciones de la homeostasis del calcio.

La calcitonina que se produce en la glándula tiroidea, dismi­

nuye la reabsorción renal de calcio de forma aguda, pero tiene

escasa importancia en la homeostasis a largo plazo, por lo que la

extirpación quirúrgica del tiroides no tiene prácticamente reper-

cusión en la concentración extracelular de calcio iónico.

El principal reservorio de calcio en el organismo es el hueso,

y su reabsorción se ve favorecida por la hormona paratiroidea que

se segrega en respuesta a niveles bajos de calcio en plasma. Otro

mecanismo para aumentar el nivel de calcio es el estímulo que

sobre su absorción intestinal ejerce la vitamina D, cuyo efecto

también se potencia por la hormona paratiroidea.

Hipercalcemia

Muchas enfermedades tienen asociada una hipercalcemia, que se

puede manifestar con diversos signos y síntomas, que suelen ser muy

escasos en el trastorno leve a moderado (11 a 14mg/100ml), pero que

se hacen evidentes con cifras por encima de 15mg/100ml. Provoca

alteraciones principalmente en el sistema nervioso central (p. ej., alte­

raciones del estado mental), en el tracto gastrointestinal (p. ej.,

vómitos), los riñones (p. ej., poliuria, cálculos renales o insuficiencia

renal oligúrica) y el corazón (p. ej., alteraciones en la conducción

cardíaca). Actualmente suele diagnosticarse en el paciente asintomá-

tico, mientras que antes se solía llegar al diagnóstico por las manifes-

taciones clínicas. Entre las posibles causas encontramos el tratamiento

con diuréticos tiazídicos, las neoplasias (hipercalcemia tumoral), la

enfermedad granulomatosa (en relación con un aumento de la absor-

ción intestinal de calcio por los altos niveles de calcitriol), la intoxi-

cación por vitamina D o el adenoma paratiroideo. Otras causas de

hipercalcemia son la terapia con litio, la tirotoxicosis, el feocromoci-

toma, la inmovilización, la intoxicación por vitamina A, la insuficien-

cia renal y el tratamiento con teofilina.

El tratamiento de la hipercalcemia consiste esencialmente en

estimular la diuresis y administrar suero salino fisiológico para

diluir el calcio plasmático, ya que además el sodio inhibe la reab-

sorción renal de calcio. Otros tratamientos incluyen el uso de bifos-

fonatos (el más habitual es el pamidronato), calcitonina, la

estimulación de la deambulación, la hemodiálisis y el tratamiento

de la enfermedad de base. Algunos casos, especialmente los rela-

cionados con neoplasias, también pueden tratarse con sustancias

que descienden el calcio como la mitramicina o los glucocorticoi-

des. En un paciente con hipercalcemia sometido a anestesia se

deben evitar los diuréticos tiazídicos y el tratamiento debe incluir

la hidratación y el mantenimiento de la diuresis con líquidos que

contengan sodio, al tiempo que se debe hacer una monitorización

electrocardiográfica para detectar alteraciones en la conducción

cardíaca como acortamientos de los intervalos PR y QT, con o sin

ensanchamiento del complejo QRS. Se deben administrar dosis

más bajas de relajantes musculares no despolarizantes en los

pacientes con debilidad muscular

( tabla 44-11

).

Hipocalcemia

Las principales causas de hipocalcemia iónica en el contexto de un

quirófano son la hiperventilación y la administración de hemode-

rivados con citrato a un ritmo mayor de 1,5ml/kg/min (v

. cap. 45 ).

Sin embargo, sus principales causas en pacientes hospitalizados son

los bajos niveles de albúmina, como ocurre en los pacientes en

estado grave con sepsis asociada, quemados o en insuficiencia renal

aguda, y también el exceso de transfusión de hemoderivados. De

hecho los pacientes en estado grave pueden presentar niveles plas-

máticos bajos de albúmina y calcio con un calcio iónico normal.

En estos casos no hay que corregir ese déficit de calcio, sino mejorar

el estado nutricional global. Los principales síntomas de la hipo-

calcemia incluyen los cambios en el estado mental, la tetania, larin-

goespasmo, hipotensión y disritmias, al tiempo que se pueden

observar los signos de Chovstek y Trousseau. El electrocardio-

grama puede mostrar alargamientos del intervalo QT o incluso

bloqueo cardíaco en casos graves. El tratamiento, a menudo preci-

pitado por una hipotensión arterial, consiste en la administración

de cloruro de calcio al 10% (1,36mEq/ml) o de gluconato de calcio

(0,45mEq/ml), que a dosis equivalentes son igualmente eficaces en

devolver el nivel de calcio a la normalidad (

tabla 44-12 )

. El gluco-

nato de calcio es de elección para la administración por vía peri-

férica, ya que la extravasación de cloruro de calcio puede provocar

una importante destrucción tisular.

Cuando la hipocalcemia es secundaria a la administración

de grandes cantidades de suero salino isotónico (como ocurre en

la reposición volémica en un estado de shock), se puede acompañar

de hipomagnesemia, la cual a su vez puede alterar los efectos de la

vitamina D y retrasar la corrección de la hipocalcemia. En estos

casos se debe siempre comprobar el nivel de magnesio y corregirlo

si es preciso. A este respecto hay que recordar que la reposición de

volemia con cierto tipo de coloides también puede contribuir a la

hipocalcemi

a 37

.

Fisiología del magnesio

Durante muchos años se ha venido utilizando empíricamente el

sulfato de magnesio para el tratamiento de la preeclampsia. Los

iones de magnesio son esenciales para muchas reacciones bioquí-

micas y su déficit puede tener consecuencias clínicas importantes.

Además, muchas de sus aplicaciones terapéuticas únicamente se

están empezando a descubrir ahora. La vía de eliminación del

magnesio es el tracto gastrointestinal y el riñón.

1478

Control de la anestesia

III

Tabla 44-11

 Principales causas de hipercalcemia

Mecanismo

Síndromes clínicos

Aumento de la

hormona

paratiroidea

Hiperparatiroidismo primario (adenomas solitarios

o múltiples y síndrome de neoplasia endocrina

múltiple); tratamiento con litio; hipercalcemia

hipocalciúrica familiar

Relacionado con la

vitamina D

Intoxicación por vitamina D; hipercalcemia

idiopática de la infancia; aumento de 1,25

dihidroxivitamina D; sarcoidosis y otras

enfermedades granulomatosas

Asociado a una alta

tasa de recambio

óseo

Hipertiroidismo, inmovilización, tiazidas, intoxicación

por vitamina A

Asociado a

neoplasias

malignas, incluida

la asociada a

insuficiencia renal

Tumores sólidos metastásicos, tumores sólidos con

mediadores humorales de hipercalcemia, neoplasias

hematológicas, hiperparatiroidismo secundario

grave (por insuficiencia renal crónica), intoxicación

por aluminio, síndrome de leche-alcalinos

Adaptada de Potts JT: Diseases of the parathyroid gland and other hyper- and

hypocalcemic disorders.

En

Isselbacher KJ, Braunwald E, Wilson JD, et al (eds):

Harrison’s Principles of Internal Medicine,

13th ed. New York, McGraw-Hill, 1995,

p 2151.