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El sistema nervioso autónomo

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2

Sección I

Fisiología y anestesia

© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito

Las interacciones farmacológicas con la adrenalina son a

menudo predecibles. La cocaína y otros inhibidores de la captación

potencian los efectos y la duración de la adrenalina exógena. El

bloqueo

a

1

preexistente puede dar lugar al fenómeno paradójico

conocido como inversión de la adrenalina (respuesta hipotensora

y taquicárdica), cuando los efectos

b

2

-vasodilatadores quedan des-

enmascarados. Los pacientes tratados con

b

-bloqueantes no selec-

tivos pueden exhibir respuestas

a

sin oposición. El bloqueo

cardioselectivo (

b

1

) no presenta este efect

o 95 .

El halotano sensibiliza el corazón frente a las catecolami-

nas, habiéndose registrado desde hace tiempo potenciales arrit-

mias problemáticas bajo anestesia inhalatoria ligera.La adrenalina

reduce el período refractario, lo que hace que el corazón sea más

propenso a las arritmias. En adultos, la dosis de adrenalina reque-

rida para producir tres contracciones ventriculares prematuras

en el 50% de los pacientes (DE

50

), a una concentración alveolar

mínima (CAM) de 1,25, fue de 2,1

m

g/kg para halotano, de

6,7

m

g/kg para isoflurano y de 10,9

m

g/kg para enfluran

o 96 .

Según

parece, los niños toleran dosis mayores que los adultos. Se ha

indicado que los niños anestesiados con halotano pueden recibir

una dosis máxima de 10 a 15

m

g/kg de adrenalina por vía subcu-

tánea cada 10 minuto

s 89 .

La hipocapnia potencia esta interacción

farmacológica.

Noradrenalina

La noradrenalina difiere estructuralmente de la adrenalina sólo en

la carencia de un grupo metilo. Al igual que la adrenalina, la nora-

drenalina actúa a nivel de los receptores

a

y

b

, aunque es caracte-

rístico su potente agonismo

a

. Con frecuencia se emplea como

último recurso presor en el soporte de la resistencia vascular sisté-

mica. Debido a su breve semivida, de 2,5 minutos, se prefiere su

uso en infusión continua.Menos de 2

m

g/kg (30ng/kg/min) pueden

dejar al descubierto los efectos de la estimulación

b

1

-adrenérgica. Por ello, las tasas de infusión suelen ser de más de 3

m

g/kg

(50ng/kg/min), que inducen vasoconstricción periférica a partir de

la estimulación

a

-adrenérgica.

La vasoconstricción periférica aumenta la presión arterial y

puede causar bradicardia refleja. El retorno venoso es activado por

la fuerte venoconstricción. El gasto cardíaco está estabilizado o

reducido, mientras que el consumo de oxígeno aumenta sensible-

mente. Dado que la resistencia vascular pulmonar puede estar

aumentada, la noradrenalina ha de administrarse con precaución

a pacientes con hipertensión pulmona

r 97 .

Como la adrenalina, la noradrenalina es un potente constric-

tor de los lechos vasculares renal y mesentérico y produce insufi-

ciencia renal, infarto mesentérico e hipoperfusión periférica. La

reducción del flujo hepático tiene importancia clínica, debido a la

notable elevación de los niveles plasmáticos de fármacos metaboli-

zados por el hígado (p.ej.,lidocaína).Para mejorar los efectos renales,

a la noradrenalina se le puede añadir una infusión de dosis bajas de

dopamina (v. caps. 82 y 86

) 98

. La extravasación de noradrenalina

induce necrosis tisular que puede tratarse con infiltración local de

fentolamina. La infusión prolongada produce gangrena de los dedos.

El potencial de vasoconstricción profunda obliga a realizar una cui-

dadosa selección de los pacientes y un minucioso seguimiento.

Dopamina

La dopamina actúa en los receptores

a

-adrenérgicos,

b

-adrenér-

gicos y dopaminérgicos. Asimismo interviene en la liberación de

noradrenalina, por lo que tiene efectos mixtos directos e indirec-

tos. Aunque la dopamina es precursora de la noradrenalina, su

efecto más importante sobre el SNA es la inducción de vasodila-

tación periférica. Es previsible la mejora del flujo sanguíneo en los

lechos renal y mesentérico en estados similares al shock, debido a

su acción sobre los receptores dopaminérgicos de la membrana

postsináptica. Es rápidamente metabolizada por la MAO y

la COMP y tiene una semivida de aproximadamente 1 minuto.

Como otras catecolaminas endógenas, se administra en infu-

sión intravenosa continua sin dosis de carga. En dosis bajas

(0,5-2

m

g/kg/min) los receptores de DA

1

son estimulados y los

lechos vasculares renal y mesentérico se dilata

n 99 .

Además de

mejorar el flujo sanguíneo renal, aumentan la tasa de filtración

flomerular y la excreción de sodio. Con una tasa de infusión de

2 a 10

m

g/kg/min, los

b

1

-receptores son estimulados y la contrac-

tilidad y el gasto cardíaco aumentan. Dosis superiores a 5

m

g/kg/

min estimulan la producción de noradrenalina endógena, que

contribuye a la estimulación cardíaca. En dosis mayores (de

10 a 20

m

g/kg/min) se estimulan los receptores

a

y

b

1

, predomina el efecto vasoconstrictor

a

-adrenérgico y el beneficio para la

perfusión renal puede perders

e 100 .

En el pasado la dopamina se usó en el tratamiento del shock

(sobre todo en estados de vasodilatación como la sepsis). Se creía

que, al intensificar el flujo sanguíneo renal, las infusiones de dopa-

mina protegían el riñón y mejoraban la diuresi

s 101 .

Sin embargo,

estudios recientes han puesto de manifiesto que la dopamina no

tiene efectos beneficiosos sobre la función renal en estados de

shock, por lo que se ha cuestionado su uso sistemático en estos

casos (v. caps. 82 y 86

) 102,103

.

El clorhidrato de dopexamina, un vasodilatador inotrópico,

es un análogo sintético de la dopamina de uso parenteral, que

puede usarse contra la ICC. La dopexamina es unas 60 veces más

potente que la dopamina sobre los receptores

b

2

-adrenérgicos, en

tanto que su potencia es sólo un tercio de la de ésta en los recep-

tores DA

1

y una séptima parte de la misma en los receptores

DA

2 104,105 .

A diferencia de la dopamina, no tiene efectos

a

-adrenér-

gicos y sus efectos

b

1

-adrenérgicos son insignificantes, por lo que

carece de actividad vasoconstrictor

a 104,106 .

Para la dopexamina se

ha comunicado una semivida de entre 3 y 7 minutos en personas

sanas y de 11 minutos en pacientes con bajo gasto cardíac

o 107 .

El

b

2

-agonismo induce vasodilatación sistémica y actividad inotró-

pica indirecta (por inhibición de la captación neuronal de noradre-

nalina

) 104-106,108,109

.La estimulaciónde los receptores dopaminérgicos

genera vasodilatación selectiva de los vasos renales y esplácnicos

e incrementa la tasa de filtración glomerular, la diuresis y la

natriuresi

s 101,110-113 .

El uso de dopexamina es preferible cuando la resistencia

vascular es elevada. En un rango de dosis de 1 a 6

m

g/kg/min, los

efectos inotrópicos, vasodilatadores, diuréticos y natriuréticos

combinados se han mostrado positivos en el tratamiento de la

IC

C 114-117

, mientras que los resultados del tratamiento del shock

séptico no quedaron bien determinado

s 116,118-122

. El uso del agente

se ha visto limitado por taquicardia dosisdependiente, sobre

todo con dosis superiores a 4

m

g/kg/mi

n 123,124

. Los efectos de la

dopexamina sobre la perfusión de la mucosa intestinal y el

hígado son objeto de controversi

a 125-130

. En general, la vasodi­

latación sistémica parece más pronunciada con dopexamina,

mientras que los efectos inotrópicos son mayores con dopa-

min

a 131

y dobutamin

a 132 .

El fenoldopam es un agonista DA

1

selectivo, potente vasodila-

tador (de seis a nueve veces más que la dopamina), que mejora la

diuresis, la natriuresis y la circulación rena

l 133-137 .

Dada su escasa

biodisponibilidad y la variedad de resultados en sus ensayos, el

fármaco ya no se investiga como posible tratamiento de la hiperten-

sión crónica o la ICC. En cambio, el fenoldopam en infusión intrave-

nosa de 0,1 a 0,8

m

g/kg/min, con titulación creciente a 0,1

m

g/kg/min,

ha sido aprobado como tratamiento de la hipertensión grave. Se trata

de una alternativa al nitroprusiato sódico, con posibilidad de menos

efectos secundarios (toxicidad por tiocianato, efecto de rebote o robo

coronario) y mejor función renal. Su efecto máximo se registra a los

15 minuto

s 138,139

.