Table of Contents Table of Contents
Previous Page  2201 / 2894 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 2201 / 2894 Next Page
Page Background

anticolinérgico

s 290 .

El uso de este agente puede permitir también una

extubación traqueal más precoz tras las cirugías laparoscópicas.

Consideraciones pediátricas

En los niños poco obedientes, asustados o con retraso mental, es

precisa la sedación preoperatoria antes de llevarlos al quirófano

(v. cap. 72)

. Dada la aversión que sienten los niños por las agujas,

se suelen emplear más fármacos orales o rectales. El midazolam

sigue siendo el ansiolítico más utilizado como premedicación en

pacientes ambulatorios pediátricos. Tras la administración de

midazolam oral, se puede separar al niño de sus padres a los 30 mi­

nutos y las dosis entre 0,25 y 0,75mg/kg no prolongan el tiempo

hasta el alta, ni siquiera tras cirugías ambulatorias corta

s 81 .

El uso

de metohexital rectal (20-30mg/kg) como premedicación antes de

un anestésico volátil puede prolongar la recuperación. La adminis-

tración tanto de etomidato (6mg/kg) como de ketamina (5-10mg/kg)

por vía rectal consigue una hipnosis de inicio rápido sin depresión

cardiorrespiratoria en niños sometidos a intervenciones pediátri-

cas. Aunque la ketamina (2-4mg/kg i.m.) puede ser un fármaco

muy útil para inducir la anestesia en un niño que no colabora o

sufre un retraso mental, el alta domiciliaria se retrasa cuando se

administran dosis más altas de ketamina (

>

5mg/kg) antes de un

anestésico voláti

l 292 .

La práctica de dejar a los padres estar presentes durante la

inducción de la anestesia es cada vez más frecuente. Una encuesta

informal observó que un 50% de los anestesiólogos pediátricos

autorizan la presencia de los padres durante la inducción de la

anestesi

a 293 .

Si los padres conservan la calma y colaboran, el número

de niños que se muestran asustados durante la preinducción y la

inducción disminuye de forma significativa. Se debe informar a los

padres de lo que va a suceder exactamente y deben aceptar mar-

charse de forma inmediata si así se lo solicita el anestesiólogo. No

se debe permitir a unos padres excesivamente ansiosos o histéricos

estar presentes durante la inducción porque aumentarán la ansie-

dad del niñ

o 294 .

Anestesia regional

La anestesia regional puede aportar muchas ventajas en pacientes

ambulatorios (v. caps. 41-43). Además de limitar la zona aneste-

siada al lugar de la intervención, se pueden reducir los efectos

secundarios postoperatorios frecuentes de la anestesia general

(p. ej., náuseas, vómitos, obnubilación,mareo

) 295 .

La anestesia regional

ofrece ventajas sobre la general por la velocidad de la recuperación

preco

z 296 ,

aunque datos recientes sugieren que no existen diferen-

cias significativas en los resultados a largo plazo tras la cirugía

ambulatori

a 297 .

Sin embargo, la anestesia regional puede reducir la

necesidad de atención de enfermería porque puede conseguir una

analgesia más eficaz en el postoperatorio preco

z 298 .

Las técnicas de

anestesia regional sencillas (p. ej., anestesia regional intravenosa,

bloqueos nerviosos periféricos) pueden ser más rentables en

pacientes ambulatorios por la menor incidencia de efectos secun-

darios y el mejor perfil de recuperación en comparación con la

anestesia general y raquídea/epidural. Una correcta selección de

los pacientes y la habilidad y el entusiasmo de los equipos quirúr-

gico y anestésico permitirán realizar incluso más tipos de interven-

ciones con anestesia regional en el futuro. Aunque la obesidad está

asociada a una frecuencia más alta de fracaso del bloqueo y com-

plicacione

s 299 ,

el uso de las técnicas ecográficas más recientes puede

mejorar la frecuencia de buenos resultados en este grupo

de paciente

s 300,301 .

Otro factor importante para aplicar con éxito un

programa de anestesia regional para cirugía ambulatoria es contar

con una sala de inducción para realizar en ella el bloqueo antes de

que el paciente acceda al quirófan

o 302 .

Técnicas de anestesia raquídea y epidural

La anestesia raquídea posiblemente sea la forma más sencilla y

fiable de anestesia regional (v. cap. 41). Por desgracia, la incidencia

de efectos secundarios es sorprendentemente elevada y los tiempos

de recuperación inmediata son más largos cuando se emplean

técnicas de bloqueo subaracnoideo en pacientes ambulatorios. Las

complicaciones más preocupantes de la anestesia raquídea ambu-

latoria se relacionan con los efectos residuales del bloqueo de la

función de los sistemas nerviosos motor, sensitivo y simpático.

Estos efectos residuales pueden contribuir a que se retrase la deam-

bulación y producir mareos, retención urinaria y alteraciones del

equilibri

o 303 .

Aunque la incidencia de cefalea tras la punción dural

se puede reducir usando una aguja pequeña de 25 G con punta

fina, parece que aumenta la incidencia de bloqueos fallido

s 304 .

Cuando se compara con la anestesia general, el uso de anestesia

raquídea con anestésicos locales de acción rápida a dosis bajas se

asocia a una incidencia mucho mayor de dolor lumbar (35 frente

a 14%

) 303,305

.

Cuando se emplean técnicas de bloqueo del neuroeje para

la cirugía ambulatoria, es importante seleccionar la combinación

de anestésico local-adyuvante más adecuada para evitar prolongar

los efectos anestésicos locales que influyen de forma negativa sobre

la «preparación del paciente para el alta

» 306 .

La analgesia prolon-

gada inducida mediante fentanilo subaracnoideo en lugar de adre-

nalina evita prolongar el tiempo hasta la micció

n 307

y reduce el

tiempo hasta el alta hospitalari

a 308 .

Sin embargo, el uso adyuvante

de opioides aumenta la incidencia de prurito y NVPO. Si se

compara con las dosis intratecales convencionales de anestésicos

locales, el uso de las denominadas minidosis de lidocaína

(10-30mg), bupivacaína (3,5-7mg) o ropivacaína (5-10mg) com-

binadas con un analgésico opioide potente (p. ej., fentanilo,

10-25

m

g, o sufentanilo, 5-10

m

g) permite conseguir una recupera-

ción más rápida de la función sensitiva y motor

a 309–311

. Las técnicas

de anestesia raquídea con minidosis que incluyen liodacaína y

fentanilo consiguieron unos tiempos de recuperación similares a

la anestesia monitorizada (AM) tras la artroscopia de rodill

a 312 .

En

la cirugía laparoscópica ginecológica ambulatoria se ha descrito

que esta técnica combinada aporta ventajas significativas sobre la

anestesia raquídea y general en cuanto a la estabilidad hemodiná-

mica y la velocidad de recuperació

n 310,313,314 .

Sin embargo, las con-

diciones quirúrgicas pueden resultar inadecuadas para las

intervenciones abdominales bajas y aumentan los efectos secunda-

rios postoperatorios (p. ej., prurito, náuseas) por los opioides

intratecales.

Los anestésicos locales de acción corta (p. ej., lidocaína y

procaína) se prefieren de forma clara sobre la bupivacaína, la ropi-

vacaína y la tetracaína para conseguir una recuperación rápida. Sin

embargo, el uso de lidocaína resulta controvertido, porque se han

descrito numerosos casos de síntomas neuropáticos transitorios

(p. ej., dolor radicular nervioso

) 315,316

. En consecuencia, los investi-

gadores están recomendando emplear lidocaína isobárica sola o

combinada a dosis bajas con fentanilo o sufentanilo. El prurito indu-

cido por fentanilo intratecal es más intenso con procaína que con

lidocaína o bupivacaín

a 317

. Sin embargo, el uso de droperidol

(0,625mg i.v.) o nalbufina (4mg i.v.) permite reducir estos efectos

secundario

s 312

. La bupivacaína y la ropivacaína intratecales se debe-

rían reservar para intervenciones ambulatorias cuya duración se

espere superior a 2 horas, porque la recuperación es más prolon-

gad

a 318

. Para intervenciones más largas, Korhonen y cols

. 319

han obte-

nido tiempos de recuperación comparables tras la anestesia raquídea

con bupivacaína hiperbárica (5mg) y anestesia general endotraqueal.

Si se compara con la bupivacaína, la duración del bloqueo sensitivo

con ropivacaína fue dos tercios y la duración del bloqueo nervioso

la mita

d 320

. La ropivacaína hiperbárica también consigue una anal-

gesia de inicio más rápido comparada con la ropivacaína isobáric

a 321

.

Anestesia en el paciente ambulatorio

2201

68

Sección IV

Anestesia por subespecialidades en el adulto

© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito